A galope de versos quiere el silencio tocar la
orilla del recuerdo, a tientas y a oscuras romper
la bruma que cubrió el ayer y en un concierto de
utopías sembrar el atardecer.
A galope de versos vuelan las palabras que
cruzando caracolas de nostalgia hacen eco en
el alma, y me pregunto: ¿si aun puede el querer
ser parte de mi orilla?
Porque aunque oculto a mis ojos he sentido el verso
llamando a mi puerta