Todo lo que tengo de ti
son unos versos que
pareciera que hablan
de mi.
Una melodía casi sublime
creada en honor a la belleza
tal vez, de una musa también
inexistente.
La breve eternidad de un momento
que no acaba de llegar y la promesa
de unos labios que se vuelven
ajenos.
En el lento pasar de las horas
que me dicen que Junio pronto
vendrá y con el volverá la
primavera.
Cubierta de fresas que maduran
en mis deseos por robar de tu
boca la dulzura que reflejan las
palabras.
Cuando creo que hablan de mi.
Y la pregunta casi inevitable
ronda los margenes de la
existencia ahora.
¿Puede el alma amar un fugaz
sueño del que no sabe mas
que el silencio y la
espera?
Te amo, aunque no sea mas
que desde otros versos, los cuales,
no se si algún día llegaran
hasta ti.
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