Permanecer en mitad del camino
renunciar a mi voz.
Si la codicia sigue llevando
vestiduras de justicia.
Si las armas las siguen cargando
manos inocentes.
Si los herrados ideales de unos cuantos
siguen pactados con la sangre de muchos.
Si la bandera del desarrollo sigue siendo
el abandono y la indiferencia.
Si los códigos del amor siguen siendo guiados
por profetas, dioses inexistentes mas que para
aquel que pretende hacer de la aberración humana
un designio divino
Si seguimos violando a la madre que nos cobija
en sus entrañas.
De hastió y desazón se viste mi camino
pero la luz viene de la mano de quien quiera
caminar a mi lado haciendo uso de la voz
pasiva que despierta para cambiar el ahora.
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