jueves, 5 de febrero de 2015

A TEMPO



Desliza pues, amor mio,
tus artes de entregado músico.

Y toca no para mi, sino en mi
la apasionada melodía que llevan 
guardando tus besos desde que me fui.

Componme a tu bene placito
pon acento a mi acorde roto
llévame a cabalgar por las notas 
de tus deseos.

Que un suave adagio nos inicie
el camino, que en el allegretto
se acompasen nuestros cuerpos
desembocando en un allegro
tembloroso y apasionado
para volver a tempo de 
la ternura.

Interminable sinfonía para dos
tras, cuya breve caesura vuelven
briosos los acordes a sonar.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.