No. tu no me cuentes las miserias
que rondan las carreteras del ser.
De como sufren los niños,
del hambre que devora
a otros mundos.
Y de la inconsciencia
que parece ser otra ciencia.
Tú. solo háblame
de las mil de aventuras que me aguardan
si me atrevo a dar un paso
mas allá de las fronteras
que limitan mi existir.
Cuéntame otra vez,
sobre aquellos mágicos bosques
donde habitan duendes, ninfas y trolls.
Descubreme aquellas antiguas culturas
escondidas entre brumas de tiempo.
Y la belleza de los mares
Y la dulzura del lento pasar de las horas
cuando se clava en la mirada
la ilusión de haber encontrado
el mas bello de los tesoros escondidos.
Pero no me cuentes
del dolor, la injusticia y la ruina
que esconden las paredes
de la miserable humanidad.
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