Pasan muchas cosas...
Pasa por ejemplo que no quiero hacerte
parte del dolor sino que seas por siempre
el maravilloso atardecer que alumbraba
el rostro y se colaba por las rendijas de tus
ojos, fugazmente como los maravillosos
momentos de la felicidad que nunca son para
siempre.
Pasa que la dulzura se quedo en tus labios
junto con el ultimo beso que el adiós nos regalo
y tu tacto de entregado amante, en el lento pasar
de las horas de aquel único camino que quisimos
y que hoy se vuelve a tornar en dos.
Pasa que la música de aquella noche...
el calor de tus manos...
el vaivén de nuestros cuerpos...
La voz tormentosa de un pasado que nunca muere.
Un presente temeroso de un futuro incierto.
Ya vez, pasan muchas cosas
y aunque solo una vez mas quisiera detener el tiempo
para que nunca pase lo que ya paso,
hoy el único afán del recuerdo es no hacerte parte del dolor.
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